«Los conocimientos en el campo de las neurociencias han conocido una expansión tal que sólo es comparable por su importancia a la de la física a principios del siglo XX o a la de la biología molecular a partir de los años cincuenta. El descubrimiento de la sinapsis y de sus funciones recuerda, por la amplitud de sus consecuencias, a la del átomo o la del ácido desoxirribonucleico. Un nuevo mundo se avecina y el momento parece oportuno para abrir este campo del saber a un público más amplio que el de los especialistas y, si cabe, hacerle compartir el entusiasmo que anima a los investigadores en este campo.» Jean-Pierre Changeux: L’homme neuronal, Fayard, París, 1983